Ecuador es zona de anidación de las Tortugas Golfina y Laúd, ambas en peligro de extinción, ayúdanos a proteger estas especies, contribuyendo a su conservación.
Un año más, la Fundación Contamos Contigo Ecuador pone en marcha la campaña «Adopta una Tortuga».
Entre los meses de julio a febrero, a lo largo de la costa pacífica de Manabí, arriban las tortugas marinas hembras para desovar.
Ellas llegan a la playa para cavar un hoyo profundo, depositar sus huevos, los tapan y luego regresan al mar. Aproximadamente, un mes y medio después nacen los neonatos.
Es en este momento donde tú puedes ayudar a la conservación y preservación de estas especies en peligro de extinción.
Mira aquí la galería de Nuestras tortugas apadrinadas
¡CIENTOS DE HUEVITOS Y TORTUGAS ESPERAN TU AYUDA!
Cuando las zonas de anidación no son monitoreadas, los nidos quedan en riesgo de ser destruidos o inundados, por lo cual en ocasiones es necesario trasladarlos donde tengan mejores posibilidades de eclosionar para que los neonatos emerjan sin amenazas y continúen su camino al mar.
Tu aporte de 5€ no solo adopta, simbólicamente, a una de estas tortugas bebé, con ello, también apoyas a los jóvenes voluntarios, respaldados por Fundación Contamos Contigo Ecuador, que se encargan de emprender acciones para proteger las nidadas, no solo de los humanos sino de depredadores como aves y animales domésticos abandonados.
¿Qué recibes al apadrinar a una tortuga?
La Fundación Contamos Contigo te hará entrega de un diploma digital que certifica tu aporte al programa y cuando el próximo nido eclosione, una foto con el nombre que hayas elegido para una de las tortuguitas grabado sobre la arena a su lado mientras avanza hacia el mar como recuerdo.
Haz tu donación
Apadrina una Tortuga
Programa para la protección y monitorización de tortugas Golfina y Laúd en la Costa de Ecuador
¡Ayúdanos a protegerlas!
Puedes hacer tu donación directa a través de la campaña Apadrina una tortuga 2022 o convertirte en teamer y patrocinarnos con 1 € al mes, Tu eliges
Tu aportación marca la diferencia